Bjór - Historia...

Aunque con más demora de la que habría deseado, voy a contaros una experiencia cervecera un tanto particular, dada la rareza legislativa que tuvo lugar en un país con apenas 300.000 habitantes y donde la cerveza es conocida como bjór. Efectivamente, estoy hablando de Islandia, mi destinación para pasar un memorable fin de 2011.

En 1915 entró en vigor una ley de prohibición para la totalidad de las bebidas alcohólicas en este país nórdico, derivada de un referéndum popular que votó en este sentido. Este veto, al cabo de un tiempo, se suavizó gracias a las presiones que, especialmente, ejerció España al amenazar a Islandia en no comprar más pescado procedente de sus aguas, aunque no para la cerveza, que en todo momento fue vista como mala, dado su precio asequible y  su presunta función de introducción al alcohol entre los más jóvenes.

No fue hasta 1933 que Islandia levantó la prohibición alcohólica... ¡excepto para la cerveza! Y hasta los 80, el gobierno islandés hizo todo lo necesario para no ceder a las crecientes presiones foráneas e interiores para disponer de cerveza dentro de sus fronteras. Fue justo en 1980 que un empresario cursó una demanda exigiendo los mismos derechos que los trabajadores de aerolíneas, que disponían de cerveza porque se traían de los duty free de los aeropuertos que visitaban. Aunque perdió el caso, Thorsteinsson fue un faro que iluminó a una sociedad islandesa que, ya de forma notable, empezaba a querer un país normalizado: véase, con cerveza. En 1989, finalmente, Islandia abrió los grifos de lúpulo y malta a su población; concretamente el 1 de marzo, que es el día que los cerveceros islandeses toman las calles de Reykjavik para celebrar esta efeméride, este fin a la tiranía del gobierno ;-).

Muerte Negra...
¿a alguien le apetece?
Primero se legalizó la cerveza de alrededor de 2,25% grados de alcohol. Actualmente en el país existe una normalidad equiparable a la de los demás países europeos en temas de alcohol, si bien en zonas rurales se considera que el consumo de alcohol en días laborables es fruto de una adicción, según me comentó un simpático islandés. Cabe destacar que tanta "prudencia" no ha sido efectiva, pues los islandeses son grandes bebedores, y su principal motivación es pillar una buena borrachera (leído en varios sitios, y comentado/validado por la dueña de un bar).

De toda esta historia han quedado huellas en la realidad cervecera islandesa, donde se pueden encontrar un montón de cervezas light (como las conocen ellos) de, exactamente 2,25%. Asimismo, existe una cultura importante de cervezas sin alcohol.

La gran paradoja de todo esto es que una de las bebidas nacionales es el Brennivín, un destilado de patata de alrededor de 40% de alcohol, conocido popularmente como "Muerte Negra" por los daños colaterales que provoca su consumo.

Con todo esto, comprenderéis que al escoger la destinación con mi mujer no tenía muchas esperanzas en cuanto a cerveza se refiere (todo lo contrario en referencia a paisajes), pero ya no sólo por historia y tradición, sino también porque el pasado diciembre tuvieron lugar en Islandia las nevadas más importantes de los últimos 90 años, y todo lo que fuera aventurarse por carreteras no principales se antojaba complicado (las contadas cerveceras de las que había encontrado información estaban en pequeñas villas inaccesibles).

Sin embargo, como podréis comprobar en los dos siguientes posts, la experiencia cervecera fue, cuanto menos, interesante: descubrí una parte de la historia de un país a través de su birra; pude probar las cervezas clásicas islandesas, pero también pude probar algunos de los principales exponentes del nuevo movimiento cervecero que Islandia, como la mayoría de países europeos hoy en día, también vive a su micro escala. Destacar también que gracias a este viaje mi bagaje de cervezas navideñas ha aumentado.

Más allá del rollo histórico de hoy, necesario para no cargar demasiado las dos próximas entradas, espero que con esta pequeña serie de posts aprendáis alguna cosa sobre este paradisiaco país y su realidad cervecera.

Maltas, pilsners y lights... la cerveza de los "súpers"


(La imagen de la botella de Brennivín fue sacada de la Wikipedia en Inglés).

Comentarios

  1. Muy interesante post Joan. Ya veo esas latas de pinta "apetitosa",jejeje. Salu2!

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    1. Gracias JAB! Pues que sepas que aún te queda por ver... ;-)

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  2. Siempre nos sales con alguna cosa verdaderamente interesante, mestre! Ya estoy deseando leer esos dos próximos post!!

    Una abraçada!

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  3. Gracias por el piropo, Pau :-). Este era un poco la curiosidad y, como bien digo, para no cargar demasiado los que vendrán a continuación. Realmente Islandia es un país bastante particular... ¡Habráse visto que prohibieran el alcohol por petición popular! A estos vikingos no hay quien los entienda :-).

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  4. Yo pretendía huir a Islandia al terminar la carrera, pero al final me acabé rajando por motivos económicos. No obstante la intención sigue latente, así que estaré atento para robarte información.

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    1. En cuanto a sitios tengo poco material, pero de birras alguna joya interesante :-). Te recomiendo el país tb en invierno, si te gusta la nieve.

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    2. Bueno, entonces te robaré birra :) La nieve me encanta, cuando estuve en Finlandia en Marzo la disfruté como un enano así que intentaré visitarlo también por esas fechas.

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  5. Lo he visto todo!, un referéndum popular para prohibir el alcohol!, y cuando se levanta...se excluye a la cerveza, jajaja suena como mi peor pesadilla, me cambio de país..de seguro.
    Pero ya se irá enmendando el camino.
    Y lo de la Muetre Negra...mm se ve como un brebaje endemoniado. Tuviste la valentía amigo?.

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    1. Yo creo que ni ellos mismos se creen lo que hicieron sus abuelos, jeje. Pues no tomé Muerte Negra: había cerveza, y es mucho más sugerente q un licor de patata con nombre de maleficio ;-). Saludos MeanMan!

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    2. Es que con ese nombre ni la pastilla azul de Matrix. Desconozco por completo cómo puede estar el susodicho brebaje, pero creo que todos nosotros nos quedaríamos con la cerveza autóctona sin lugar a dudas, aún sin haberla probado.

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  6. JAB, piensa además que tenía que beber latas de cerveza para dártelas luego! :-) Espera a ver el post de mañana...

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    1. Ya lo he visto, y tiene buena pinta. Lo leo en breve tranquilamente. Salu2!

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