Gastrobirraire #3 - Papillote de Salmón y Verduras con Witbier

La sección más exquisita del blog vuelve en 2013 para ayudaros con la cuesta de enero. Pero no me refiero a la cuesta económica, sino a la cuesta que deberíais estar todos planteando para subir y bajar unas cuantas veces para volver al peso de antes de vacaciones; que os habéis puesto como auténticos cochinos.

En fin, que pensando en la salud birraire general, sin renuncias en cuanto a cantidad ni calidad de comida, Mrs. Birraire me propuso pensar un plato ligero de pescado al horno para un domingo cualquiera. ¡Genial! Rápidamente decidimos por dónde irían los tiros, y así fue como surgió el siguiente plato:


Papillote de salmón y verduras, con esencia de witbier:

Ingredientes (para 4 personas):
  • 1 calabacín.
  • 1 cebolla.
  • 1 pimiento rojo.
  • 1 berenjena.
  • 4 filetes de salmón.
  • 100 ml. de cerveza tipo witbier (en nuestro caso, una Hoegaarden).
  • Sal, pimienta y aceite de oliva.


Preparación:
  1. Abrirse una cervecita cualquiera para cocinar más a gusto (este paso lo propuse yo, y mis notas apuntan que fue una Ignis & Flama de Struise, yum yum).
  2. Limpiar y cortar las verduras en tiras finas.
  3. Poner las verduras cortadas en un recipiente con un poco de sal, pimienta y unos 10cl de cerveza de trigo tipo belga. Dejarlo 15 minutos.
  4. En un trozo de papel de aluminio, poner las verduras, y encima de éstas un filete de salmón con un poco de aceite y sal. Se pliega el papel de aluminio de forma que quede totalmente cerrado, como una bolsita.
  5. En el horno, precalentado a 180ºC, se ponen las 4 bolsitas de papel de aluminio con las verduras y el salmón y se dejan cocer durante 30 minutos.

Et voilà! La papillote est prêt! Sólo quedaba ponerse las botas con este ligero pero sabroso plato. Para acompañarlo debidamente, apostamos por una cervecita belga en botella de 75cl., que estaba esperando su momento en la bodeguita: la Bush Triple.

No era complicado intuir que cerveza y plato casarían fantásticamente. El plato era suave, y parecía querer una cerveza rubia; pero el sabor más contundente del salmón requería de una buena dosis de carácter, y por ello una tripel podía ser un acierto. Y efectivamente lo fue, ya que la notoriedad del alcohol de la Bush cortaba de raíz cualquier intento de imposición por parte del pescado, quedando ambos bien equilibrados, sin taparse entre ellos. Fue de agradecer el poco condicionamiento de paladar que ofreció, en este sentido, la susodicha birra.

Asimismo, se libró en el plato una bonita batalla de sabores entre el punto especiado de la Triple y las verduritas del papillote, que hechas al vapor exponían sus virtudes con claridad, acompañadas de un ligero punto especiado que recordaba un montón los toques de cilantro típicos de la Hoegaarden utilizada para la cocción en el horno.

La witbier, pues, funcionó; si bien una tripel podría cumplir también magníficamente con la misma tarea. Fuera de estas cervezas, apostaría por una dubbel para cocer salmón y verduras, aunque es de imaginar que cambiaría notablemente la impresión gustativa del plato (pero no por ello sería menos interesante).



En fin, que dicen que hay que cuidar la línea después de vacaciones, pero nunca se puede renunciar a pegarse buenos y sabrosos homenajes. Salut i birra!

Comentarios

  1. Nyam nyam.... quina pinta més bona i més sana!!! Prenc nota de la recepta... Esta es de las facilitas para un negado como yo!!

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    1. Sí, se me olvidó comentar (aunque creo que ya se ve fácilmente) lo rápida y sencilla que es de preparar :-). ¡Ya me dirás si la pruebas! Salut Txema!

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  2. Ya sé qué cenar hoy.
    Mil gracias por la receta!

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    1. Mil de nadas, encantado de haberte dado una buena idea :-). ¡Ya contarás qué tal el papillote!

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  3. Me encanta el salmón, la receta tiene una pintaza asique la haré en casa :)

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    1. Te lo recomiendo, porque a parte es muy sencilla y rápida :-). ¡Un saludo!

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  4. Que rico! me encantan los papillotes. Aunque con mi tendencia a comer el pescado crudo 30 minutos en el horno se me hacen un poco excesivos. Por eso no se me da bien esta receta, o se me pasa el pescado o se me quedan crudas las verduras, jajaja, no se puede tener todo en esta vida...
    Pero bueno, como bien dices se acompaña de una buena cerveza mientras se cocina y de otra mientras se come y se pasan todos los males.
    Saludos!!!

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    1. ¡Buenas! Pues a 180º los 30 minutos dieron para un salmón al punto (cocido pero con ese punto que recuerda el pescado crudo) y las verduritas con un puntito crujiente. Quedó perfecto :-).

      Y el maridaje mientras se cocina y mientras se come, básico. Jaja, ¡un saludo!

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    2. probare entonces a hacerlo a baja temperatura...... :D

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  5. Suculenta receta la que nos planteas Joan. Cuando he leído lo de abrir una cerveza para tomarla mientras cocinas el plato, me ha recordado a una desternillante receta de un pavo al horno que circulaba por internet hace años, en la que el cocinero acompañaba cada paso en la receta de un vasito de whisky, jejeje. Maridaje acertado, aunque con el riesgo de que la poderosa Bush se "comiera" al pescado con su elevado contenido alcohólico, aunque siendo salmón cierto es que "gana kilos" como oponente. Enhorabuena por el festín! Salu2!

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    1. ¡Buenas JAB! Jaja, a vasitos de whisky creo que la receta habría quedado mal al final :-P. El riesgo que comentas era mi gran duda inicial; seguramente de tenerla habría apostado por una Tripel más moderada en cuanto a potencia gustativa. Pero finalmente estuvieron ambos a la altura, sortosamente.

      ¡Gracias y saludos!

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